Busca villas en Lago Maggiore

Todo espectacular, sobre todo la atención de Charin, quien en todo momento te atiende con una sonrisa muy amablemente. Todo es de calidad, la arquitectura, el paisaje excepcional, el desayuno, los espacios, sobre todo el principal donde se encuentra el salón del comedor. Todo de lujo

El apartamento se encuentra en una ubicación privilegiada, junto a la Piazza del Popolo y la vía Cavour. Es un lugar muy tranquilo y con todos los detalles para sentirte como en tu propio hogar. La terraza es una maravilla. Y lo mejor de todo, su propietario, Lucca. Una persona educada, amable y servicial que nos facilitó mucho las cosas y cuya ayuda fue inestimable. Lo recomiendo encarecidamente.

La villa y la finca son muy bonitas. No tuvimos tiempo a probar la piscina pero tenía muy buena pinta.

La ubicación y la amplitud de la casa. Giovanni es un anfitrión de maravilla

Inmejorable ubicación. Las vistas al lago desde la habitación son una maravilla. La comodidad de la cama, la variedad de la carta del restaurante y sus increíbles vistas.

El lugar es fantástico. Las vistas desde la terraza de la habitación. El silencio al caer de la tarde cuando desaparecen las expediciones de visitantes. La habitación es modesta pero la terraza es un lujo. El aseo está limpio y todo funciona bien. El restaurante del hotel con calidad, imaginación, buen servicio, y no es disparatado de precios para la zona. El desayuno en la terraza exterior muy agradable con un buen capuchino y surtido suficiente para los distintos gustos.

La casita de Ralph es preciosa. Se trata de un pequeño museo de una delicadeza exquisita. El gusto en la decoración, en la selección de cada detalle consigue esa sensación de pertenecer a la obra de arte. Elegancia, clase, unas vistas de ensueño, un jardín que es una maravilla...y si a toda esta comunión le sumas la amabilidad de Ralph, su simpatía , sus conocimientos , consigues la casa perfecta en un lugar de ensueño. Totalmente recomendable, regresaremos!

Las excepcionales vistas al lago desde la habitación. La ubicación, zona muy tranquila, pegada al lago y a través de un paseo precioso llegas en 10 minutos al casco antiguo (restaurantes y comercio) El desayuno nos encantó con la opción de disfrutarlo en el jardín exterior Muy valorable que tiene parking gratuito El hotel mantiene todo el ambiente de la villa que fue en su origen

cannobio en un pueblo precioso y el hotel es una buena opción a precio razonable. el papel de vater era de lujo. tiene un supermercado al lado.