Buscar alojamientos en barcos en Holanda Septentrional

La atención fue súper amable y servicial. El desayuno es abundante y en general el ambiente estaba muy limpio. Las habitaciones son chicas como todo camarote de barco. Fue una excelente experiencia.

Me gustó todo dado lo peculiar y diferente que es alojarse en una casa barco.

La ubicación porque está cerca de la estación central y puntos de visita más importantes de Ámsterdam. la sala de sala de estar que está cerca de recepción también es bonita y tiene un ventanal muy amplio con vista a los barcos en el canal. Lo otro que me gustó fue la atención de las personas de recepción. Todos fueron muy amables. Además tienen refrigeradora para guardar cosas y te dan platos para comer en el lobby cuando llevas comida.

Era una casa barco encantadora,muy bien ubicada en un entorno precioso y tranquilo.Estaba situada en un pueblo encantador a 20 minutos de Amsterdam.

Muy buen plan para hacer con niños pequeños, nos tocó la habitación de abajo y venían los patos a nuestra ventana para que les diéramos algo de comer. Hermosa experiencia. Los barcos son gratuitos y vienen bastante seguidos. Creo que fue lo mejor de nuestra visita a Amsterdam ya que no es una ciudad muy para niños pequeños

La ubicación frente al canal y los barcos fue muy linda La recompensa de un drink por solicitar no limpiar la habitación ese día El desayuno no estuvo mal tampoco

Hemos disfrutado muchísimo. Cuando se terminaba el dia de turismo quedaba volver al barco, los niños encantados cenando en la terracita y viendo pasar los barcos. Tiene todo lo que se necesita para una estancia corta de vacaciones. Tiene microondas y menaje.

Los precios en Amsterdam son elevadísimos pero encontramos este hotel al otro lado de la orilla. No supone ningún problema ya que hay barcos gratuitos que te llevan a la estación central y llegas en poco más de 10 min. El personal muy amable y el barrio muy tranquilo.

Sin lugar a dudas la ubicación. Es excelente. A 10 minutos andando de la Estación Central, de la plaza Adam, del Barrio Rojo, de los muelles de los barcos que te llevan a los canales, de paradas de tranvias... Muchos restaurantes cerca. A 15 min del punto donde arrancan las excursiones organizadas en autobús. Valorar que a pesar de lo cutre del equipamiento de la habitación, todo se veía limpio y sin malos olores. Aseo renovado y limpio, aunque muy pequeño.

La experiencia de alojarse en una casa barco es muy agradable, más cuando la vivienda reúne todas las características de confort: buena calefacción, agua caliente sin limitación, cómodas camas, ropa de cama y toallas muy limpias, zona de estar muy agradable, terraza amueblada...